jueves, 1 de diciembre de 2011

# EL ALMA #


















# EL ALMA #

Si prestás atención,
las almas no se reflejan
en ningún espejo o pedazo de mar,
tal vez silban el susurro del viento
cuando nuestros oídos duermen,
tal vez exploran los espacios yermos
que abren nuestros sueños,
pero nunca nos mirarán a la cara,
nunca podrán ser luz verdadera en nuestros ojos;
su compañía es una sensación intangible, ilusoria.
Sin embargo, su fragilidad inmaterial
es lo último que muchos venderían,
tal vez realmente no tenga precio,
yo creo que el diablo no es muy listo
o no es un gran oferente.
Hecha de carne fantasma, de sangre sin sol,
de furia en su máxima expresión,
de silecio sobre silencio;
es el lado místico que inventamos
para usar la magia de la fe
o sólo otro absurdo personaje literario
que devendrá en el olvido,
en el karma penitente,
en el abandono del hombre.
Mi alma, personalmente, vive más
en los renglones que se llenan de versos
que en el incienso de las iglesias,
que en el mismo cuerpo que cada día
se levanta a enfrentar al mundo,
que en el resto de corazón que me queda
y se retuerce.
Mi alma, si en verdad existe,
verán, no es más que tinta de poesía
y que el despojo de alguna vieja soledad
que nunca encontró refugio
porque jamás cuadró en la vida real.

No hay comentarios: