jueves, 16 de octubre de 2014

# EL PROBLEMA NO ES DEL OPTIMISMO #




# EL PROBLEMA NO ES DEL OPTIMISMO #

No pretendo ser presuntuoso ni
peregrinar por el ocaso de la fe
y la paz, y la concordia y la buenaventura;
es otro planteo el que inscribo
en la turbiedad de los decires y las palabras,
es una escisión en el pensamiento que
quizás sea mayoritario e imperecedero.
Puede que mi consideración se figure
desde el odio, la rabia y la irreverencia,
poco me importa el orígen,
me ocupo más bien del fin.
Me refiero a los sembradores de optimismo,
a los que predican el amor puro,
a los que insisten en que
avanzar por el camino
siempre es la opción más sabia,
la que te deja mejor parado frente a la vida
y con más chances de progreso.
Esculpen bendiciones esbeltas,
escriben odas a la luz,
al sol, al prójimo y a su espíritu,
al perro fiel y al ave que reluce en los cielos,
a cada flor, a cada alegría
y al dios de todas las cosas.
No dicen nada más, no tienen otra fórmula
y creo que se engañan
tanto como quieren engañarme,
de todas formas es bien sabido que
el problema no es del optimismo
sino del mensaje vacío con que lo pregonan.

miércoles, 8 de octubre de 2014

# DE LAS MENTES MÁS OBCECADAS DE ESTE PLANETA #




# DE LAS MENTES MÁS OBCECADAS DE ESTE PLANETA #

Me gusta que la literatura duela,
que se clave en las venas y
colme de cicatrices los crepúsculos;
que diga cien veces lo que quiero escuchar
y mil veces lo que no.
Me gusta su tizne de
catástrofe, de alarde, de destino;
quiero terminar un libro y
quedar aplacado por la fascinación
de sus laberintos intrínsecos e infinitos,
quiero tormentas y borrascas,
quiero miedo y lujuria,
quiero una historia por cada causa perdida,
un espejo por cada pena solitaria,
una virtud por cada pecado anónimo.
Abrazaré las calaveras sanguinolentas,
los fantasmas que naufragan esquizofrénicos,
los beodos enfermos de placeres prohibidos,
los infantes podridos y descorazonados;
me quedaré con sus muertes prematuras,
con sus eternidades condenadas al vacío,
sus vacilaciones y sus demonios,
sus flores marchitas y sus almas infectas;
me quedare con todos y con cada uno
de mis héroes por siempre reales
nacidos
de
las
mentes
más
obcecadas
de
este
planeta.