domingo, 6 de noviembre de 2011

# CONVERSACIONES #














# CONVERSACIONES #

¿Sabés qué Ale?
no ver el sol asomándose
es como el infierno,
las paredes son tan altas
que apenas si puedo imaginar
el cielo abierto abrazando,
abrazándome. A eso me refiero, el calor,
que exista cada día el calor.
Te digo, quiero vivir
y que no pese tanto,
que no se trate de eso,
que nos quede otra forma,
no se, te juro, no se.
No puedo decirte algo mejor,
pero otra dirección
debe existir y probablemente
esté metida en el último lugar
donde algún día buscaremos.
Se que si nos miramos,
nos entendemos,
ya se, ya sabemos donde duele,
donde dolemos.
A veces sana,
a veces no,
pero pasa, es el otro plan
que tenemos armado,
tenemos nuestra astucia,
nuestro invento de niebla,
nuestro consuelo silencioso,
pero viste, al fin y al cabo,
tampoco es un gran plan.
Y es que sabés, está por llegar el lunes,
o sea, los rincones de oscuridad,
lo mismo en su escala de grises,
lo mismo que empaña el espejo,
lo mismo llenándose de polvo
y hace ruido,
eso siempre hace ruido,
y el eco, es el eco lo que late
y llega a donde no llega el olvido,
por eso te digo Ale,
que por lo menos exista cada día el calor,
a eso me refiero,
el calor.
 

No hay comentarios: